Y sigue...la línea en la que examino mis nuevos gustos y aficiones, mis nuevos caminares por la playa, el amor que estoy poniendo a crecer en mi ventana, creo voy bien...espero seguir haciendo lo mismo.
Prefiero ya no evadirte
sino invadir cada rincón tuyo.
No es que posea aires megalómanos
ni quiera perpetuarme a costa tuya
o desee un siglo de inútil estatuaria
acumulada entre tus recodos invisibles y neuronas,
en realidad,
sólo quiero entrar humildemente a tu vida
(gran paradoja para un bombeta como yo)
como lo he hecho, a pocos
y aún así falta mucho...
pero sí me invade el deseo de abrigarte
(a pocos con trozos de mi aliento hechos cuerpo)
del frío del sol pero también de las miradas de mierda
igual sé no te importan
pero es tan especial sentirse ñoño de vez en cuando
(y sentir que aporto algo a tu vida)
quiero pues entrar por cada abertura
emocional mental física y hasta metafísica
a ponerte encantos y
"buenos días"
apilarlos hasta que caigan por las comisuras de tus labios
quiero apropiarme sólo para entregarte los frutos
de la cosecha de los días laborados en silencio
la casi mitad de enero que te he visto
ponerlos en un punto donde puedas buscarlos a veces
y decir: "aquí he estado",
sin penas o compromisos, ni cuitas emocionales.
Espero nunca arrepentirme de entrar pues
sin pompas ni vanaglorias
espero poder salir igual si ambos lo juzgamos así
y si todo da un buen giro...en Z o en U o en la forma que sea
pero nuestra...
espero ya tener un espacio permanente
entre ovejas y mañanas de playas sin sosiego.
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